Es posible que la razón por la que nos reímos sea para sentirnos mejor. Reirnos es altamente contagioso (aún más que bostezar) y ayuda a que la gente se una.
La función social de la risa es obviamente importante para especies como la nuestra, y por ello la disfrutamos.
Los mecanismos de ese placer incluyen efectos en el sistema inmunológico, mejoramiento en el funcionamiento de los vasos sanguíneos y el corazón, aumento de los niveles de endorfinas en el cerebro, lo cual alivia el dolor, reducción de las hormonas de estrés y relajamiento de músculos.[:]