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Receta de pollo con champiñones a la crema: fácil, cremosa y deliciosa

Receta de pollo con champiñones a la crema
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El Pollo con Champiñones a la Crema es una de esas recetas que parecen complejas, pero en realidad, son muy fáciles de preparar. Lo mejor de este plato es que, con unos pocos ingredientes y una cacerola con tapa, puedes lograr una combinación de sabores intensos y una textura cremosa que hará que todos pidan más. Como chef con experiencia en gastronomía internacional, te llevaré paso a paso para que disfrutes de esta receta en casa.

Receta Explicada de Pollo con Champiñones a la Crema

Ingredientes

Para 4 personas necesitarás:

  • 4 pechugas de pollo cortadas en trozos del tamaño de un bocado grande (puedes usar muslos si prefieres)
  • Harina todo uso sin preparar, para enharinar el pollo
  • 4 cdas de harina todo uso
  • 250 g de champiñones frescos (limpios y cortados en rodajas)
  • 2 cebollas medianas, picada finamente
  • 3 dientes de ajo, picados
  • 1 cda de zumo de limón
  • 150 ml de nata para cocinar (crema de leche)
  • 2 tazas de caldo de pollo
  • 3 cdas de mantequilla
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 cucharadita de tomillo seco o fresco
  • Sal y pimienta al gusto
  • Perejil fresco picado para decorar (opcional)
  • Maizena (opcional)

Preparación Paso a Paso

Paso 1: Preparar el Pollo

Comienza sazonando las pechugas de pollo con sal y pimienta por ambos lados, enharina y sacude el exceso. En una sartén grande, calienta las dos cucharadas de aceite de oliva. Este combo asegura que el pollo adquiera un dorado perfecto sin quemarse.

Cuando el aceite esté caliente, coloca las pechugas de pollo y dóralas durante 5-6 minutos por cada lado, hasta que estén bien cocidas y tengan un color dorado hermoso. Si es necesario, hazlo en dos tandas. Una vez listas, retíralas del sartén y resérvalas. Aquí es importante no cocerlas en exceso, ya que se terminarán de cocinar cuando agreguemos la salsa.

Paso 2: Sofreír los Champiñones y el Ajo

En la misma sartén, agrega la mantequilla,  añade la cebolla y el ajo, tomillo, y sofríe a fuego medio. Cocina todo junto hasta que la cebolla esté translúcida y el ajo desprenda su delicioso aroma. ¡Este paso es clave para darle profundidad de sabor a la receta!

Paso 3: Crear la Salsa Cremosa

Con el ajo y cebolla listos, agrega la harina y mezcla bien, de inmediato agrega el caldo de pollo. Este desglasará la sartén, absorbiendo todos esos sabores que quedaron pegados del pollo. Desglasa y remueve por unos segundos, agrega el zumo de limón.

Cuando empiece a hervir agrega los champiñones y las piezas de pollo, sal y pimienta al gusto. Revuelve bien para integrar todo.

Cuando empiece a hervir baja la llama y tapa la cacerola, deja que cocine por unos 20 minutos.

Finalmente, añade la crema de leche y deja que hierva unos 5 min más. Rectifica sal y pimienta. Si deseas este mas espesa, agrega una cucharadita de maizena.

Paso 4: Servir y disfrutar.

  • Acompañamientos: Este plato es perfecto con una guarnición de arroz blanco o puré de papas. También puedes servirlo con verduras al vapor para una opción más ligera.
  • Textura: Si prefieres una textura más suave para los champiñones, puedes añadir un poco más de nata o incluso un chorrito de leche.
  • Toques Finales: Al servir, espolvorea perejil fresco picado por encima. No solo aporta un toque de color, sino que también equilibra los sabores cremosos con un toque fresco.

Variantes de la Receta

  • Con queso: Para los amantes del queso, puedes añadir 100 gramos de parmesano rallado a la salsa. El queso se derretirá y le dará un toque aún más cremoso.
  • Versión baja en calorías: Si prefieres una versión más ligera, puedes sustituir la nata por leche evaporada o una versión de crema baja en grasa.
  • Toque de vino blanco: Si te gusta experimentar con sabores más profundos, puedes agregar media taza de vino blanco seco al sartén justo antes de añadir el caldo. El vino aportará una nota ácida y elegante.

Un plato digno de restaurante en casa

Esta receta de pollo con champiñones a la crema es la prueba de que no necesitas ser un chef profesional para preparar un plato digno de restaurante en casa. Con ingredientes sencillos y un poco de técnica, puedes sorprender a tu familia o invitados con una comida rica, reconfortante y llena de sabor.