Conozco muchas personas que trabajan por internet ofreciendo diferentes servicios dentro de su área de experiencia, y les va relativamente bien.
También conozco a otros que solo ofrecen un servicio específico —por ejemplo, subtitulaje o redacción— y han logrado mantener una cartera de clientes estable gracias a la calidad y la ética de su trabajo. Mira el secreto para ser el mejor en lo que haces.
Sin embargo, hay quienes, a pesar de ser muy buenos en lo que hacen, no logran mantener suficientes clientes activos para alcanzar estabilidad financiera y laboral.
- Algunos tienen días con demasiado trabajo, casi imposible de manejar.
- Otros pasan semanas esperando que llegue algún encargo, sin nada fijo.
Lo más común es que estas personas terminen abandonando el trabajo freelance para volver al mercado laboral tradicional, buscando la seguridad de un pago fijo semanal o quincenal. Creen que así podrán sentirse más tranquilos y estables.
Pero la verdad es que sí puedes encontrar estabilidad como freelancer si sigues algunos consejos clave.
3 Recomendaciones para tener estabilidad como escritor freelance
1. Valora tu trabajo
Al inicio puede que aceptes trabajos con una paga baja para ganar experiencia y entrar al medio profesional. Eso está bien, pero cuidado:
Si conviertes los precios bajos en tu sello, los clientes te buscarán por barato y no por bueno.
Recuerda que tu tiempo, conocimientos y experiencia tienen valor. Sé seguro de ti mismo, transmite profesionalismo y construye una reputación atractiva para los clientes con los que realmente deseas trabajar.
2. Define tu cliente ideal
Tener claridad sobre con quién quieres trabajar te ahorrará muchos problemas. Pregúntate:
- ¿Prefiero clientes comunicativos o que me den libertad total?
- ¿Quiero alguien que valore la calidad y pague por ella, o alguien que solo busque lo más barato?
- ¿Busco proyectos a largo plazo o trabajos puntuales?
Cuando defines a tu cliente ideal:
✅ Ahorras tiempo y energía en propuestas improductivas.
✅ Evitas relaciones laborales negativas.
✅ Aumentas tus posibilidades de éxito y satisfacción.
3. Fija una cuota mínima de trabajo diario
Aunque no tengas proyectos en curso, dedica tiempo cada día a actividades como:
- Escribir propuestas de calidad.
- Publicar en tu blog personal.
- Buscar colaboraciones con otras páginas web.
- Ofrecer tus servicios en plataformas freelance.
- Mejorar tu portafolio profesional.
Mantenerte activo es vital para no “enfriarte” y seguir avanzando. Ese esfuerzo constante será lo que atraiga nuevos clientes y te permita crecer.
Si estás comenzando, es normal que gran parte de tu tiempo se invierta en estas tareas más que en escritos pagados. Sin embargo, esto será clave para tu desarrollo profesional y para conseguir una cartera sólida de clientes.
En conclusión: ser freelance no significa vivir en la inestabilidad. Con organización, visión y disciplina, puedes construir una carrera estable, rentable y motivadora.