Las mujeres tienen cuerpos que son aproximadamente 55% agua, comparado con 60% en los hombres, y las mujeres también pesan en promedio un 15% menos que los hombres.
¿Qué significa entonces?
Eso significa que las mujeres empiezan con alrededor de 11 kg menos de agua que perder.
Un estudio hecho en 2010 por la Universidad de Connecticut reveló que con niveles leves de deshidratación -1,5% del volumen normal de agua-, la capacidad de concentración de las mujeres bajaba.
Pero otra investigación del 2010, publicada en Experimental Physiology, encontró que cuando las mujeres hacen ejercicio no empiezan a sudar hasta que todo el cuerpo ha alcanzado una temperatura más alta que los hombres. Eso podría haber sido la respuesta de la evolución para ayudar a las mujeres a conservar agua.