El pájaro insaciable
Otra de chistes buenos: ¿Quien quiere un enorme pájaro? Llega un tipo a un Restaurante lujosísimo con un monumento de mujer y un pingüino detrás. El tipo de la puerta le pregunta: -«Mesa para dos….?».
Otra de chistes buenos: ¿Quien quiere un enorme pájaro? Llega un tipo a un Restaurante lujosísimo con un monumento de mujer y un pingüino detrás. El tipo de la puerta le pregunta: -«Mesa para dos….?».
Otra de chistes buenos: ¿Quien quiere un manos libres? Año 1985, el pana Arnoldo, al salir de la oficina, se detuvo en el Centro y compró un moderno teléfono doméstico «manos libres» (con Speaker) Al llegar a casa, le dice…
La siguiente historia de muestra que hay que cerciorarse de las direcciones de correo electrónico antes de enviar uno para evitar malos entendidos o males mayores: Un hombre dejó las nevadas calles de Chicago para pasar unas felices vacaciones…
…Conectando… … Iniciando conversación de chat en canal «Amigos»… H – Hola, M – He estado todo el día pensando en tí. H – Yo también, M – Hace mucho que no lo pasaba tan bien: Quiero conocerte en…
Lanzándose desde una cima, un águila arrebató a un corderito. La vio un cuervo y tratando de imitar al águila, se lanzó sobre un carnero, pero con tan mal conocimiento en el arte que sus garras se enredaron en la…
Pastaban juntos siempre tres bueyes. Un león quería devorarlos, pero el estar juntos los tres bueyes le impedía hacerlo, pues el luchar contra los tres a la vez lo ponía en desventaja. Entonces con astucia recurrió a enojarlos entre sí…
Encontró un lobo a una cabra que pastaba a la orilla de un precipicio. Como no podía llegar a donde estaba ella le dijo: — Oye amiga, mejor baja pues ahí te puedes caer. Además, mira este prado donde estoy…
Llevó un mercader a su asno a la costa para comprar sal. En el camino de regreso a su pueblo pasaban por un río, en el cual, en un hueco, su asno resbaló mojando su carga. Cuando se levantó sintió…
Un hombre que pescaba con caña en un río, cojió una diminuta trucha. Mientras estaba quitándole el anzuelo para echar el pececillo a la cesta, abrió este su boca implorando piedad y rogando al pescador lo arrojase al río otra…